Muchas son las versiones acerca de la procedencia del café y de como se convirtió en una bebida tan popular.
Lo demás es como en todas las tradicionales novelas de amor y aventuras: se encontraron las miradas, - las de Alí y Jazmín, - y brotó de inmediato un profundo y tierno sentimiento, amor sublime, amor eterno... Por supuesto, que el romance duró solo hasta que el malvado rey se enteró que el plebeyo Alí, flaco, desgarbado y sin un centavo, pretendía a su tesorito. (Al parecer en esos tiempos la medicina no era una profesión muy lucrativa). El Negus, ordeno atrapar al osado y lo deportó al bosque más lejano que encontraron sus tropas y en el término de la distancia el galán estaba fuera de circulación. El pobre Alí, abatido, comprendido, que solo consiguiendo un regalo diferente y magnífico, tendría alguna oportunidad de reconquistar a su amada Jazmín.
Dice la leyenda que trabajó durante tres años, día y noche, sin descansar, buscando tan ansiada ofrenda. Para no quedarse dormido, comenzó a tomar una infusión que había descubierto casualmente cuando unas bayas de un arbusto cercano cayeron en el agua donde hervían sus alimentos.
Cuando Alí estaba a punto de desfallecer, sin haber encontrado el talismán que buscaba, y tomando el último trago de su amargo café, brotó de pronto como una luz la gran idea. Desde hacía muchos meses tenía ante sus ojos el regalo que buscaba, lo había tostado, disfrutado de su negra y olorosa infusión y reconfortado con su calor interno, por supuesto estamos hablando del Café Alí, llevó su regalo al sultán Negus Neguesti, y este quedó tan satisfecho con el presente, que en recompensa le otorgó la mano de Jazmín. Los siguientes años las pasó el rey, plácidamente, viendo jugar y crecer a sus nietos en los regios jardines de palacio, mientras compartía con sus numerosas esposas, Alí y Jazmín unos deliciosos cafecitos.
La segunda y más fuerte y aceptada de las leyendas acerca del descubrimiento de la bebida del café es la que hace referencia a un pastor llamado Kaldi. La leyenda dice que Kaldi se dio cuenta del extraño comportamiento de sus cabras después de que habían comido la fruta y las hojas de cierto arbusto. Las cabras estaban saltando alrededor muy excitadas y llenas de energía. El arbusto del que Kaldi pensó que sus cabras habían comido las frutas tenía como frutas parecidas a las cerezas. Entonces Kaldi decidió probar las hojas del arbusto y un rato después se sintió lleno de energía.
Kaldi después llevó algunos frutos y ramas de ese arbusto a un monasterio. Allí le contó al Abad la historia de las cabras y de como se había sentido después de haber comido las hojas. El Abad decidió cocinar las ramas y las cerezas; el resultado fue una bebida muy amarga que él tiró de inmediato al fuego. Cuando las cerezas cayeron en las brazas empezaron a hervir, las arvejas verdes que tenían en su interior produjeron un delicioso aroma que hicieron que el Abad pensara en hacer una bebida basada en el café tostado, y es así como la bebida del café nace.
Una tercera leyenda sobre el café viene de Arabia. Hacia el año 571 nació Mahoma en
Escribió el Corán, el libro sagrado de los musulmanes y atribuido por el profeta a dios mismo. En una colección de dogmas y preceptos morales, presentó el fundamento de la civilización musulmana, la única fuente del derecho, la moral, la administración y la vida misma. El Corán admite la predestinación, "Estaba escrito" dicen los musulmanes cuando les sucede una desgracia, pero, el Corán también hace al hombre responsable de sus actos. La obra de Mahoma le hizo ganar un gran número de discípulos, pero también una gran cantidad de adversarios, cuando éstos fueron mas poderosas, en el año 622 tuvo que huir, esta fuga (Hegiría) es considerada en la historia como el principio de la era musulmán.
Estalló la gran guerra y Mahoma vencedor, hizo en 629 un viaje solemne a
Mahoma, buscó un nombre al regalo recibido y lo llamó "Qahwa" que significa excitante, energético, vigorizador, el café había entrado por la puerta grande al mundo árabe.
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